Detección activa de vida de rostros y captura automática de rostros
La detección activa de la vida del rostro es una medida de seguridad utilizada en los sistemas biométricos para confirmar que durante la autenticación está presente una persona viva, en lugar de una representación fraudulenta como una foto o una máscara. Este método requiere que los usuarios realicen acciones específicas en tiempo real, como parpadear, sonreír o girar la cabeza, para demostrar vivacidad. Al analizar estos movimientos provocados, el sistema puede distinguir eficazmente entre usuarios genuinos y posibles intentos de suplantación de identidad.