xiaomi walkingpad c1 review

Si me definieras como deportista, mentiría. Y yo haría lo mismo si dijera que, de vez en cuando, me gusta salir a correr por la calle. La realidad es que detesto hacer ambas cosas y, aunque me gustaría estar dotado de esta naturaleza, mi rutina diaria no me permite dedicar tiempo (y energía) a este tipo de actividades. Pero la edad avanza y en el último año no hay duda de que mi (nuestro) estilo de vida se ha trastocado totalmente. En definitiva, si antes (aunque no de forma "competitiva") la gran mayoría de la gente tenía la oportunidad de moverse o dar largos paseos, ahora para los que siguen las reglas como yo, este lujo ya no existe. Y quién sabe cuánto tiempo tendremos que vivir pegados a ordenadores, smartphones o televisores, por trabajo, estudio o placer, sin la posibilidad de apagarlo todo y salir corriendo de casa.

Este es el pensamiento que desde hace tiempo ha despertado mi curiosidad por las cintas de correr, pero el espacio que tengo disponible en casa siempre ha sido reducido, lo que durante mucho tiempo me hizo desistir de comprar. Pero luego, vi el Xiaomi WalkingPad C1 que con su estructura plegable me convenció de que solucionaba profundamente el problema del estorbo, y no pude resistirme a probarlo. ¿Podría haberme ayudado a combatir el sedentarismo de mi último año de vida? En cierto sentido sí, sobre todo gracias a sus múltiples funciones inteligentes y una aplicación que dan ganas de usarlo continuamente. La realidad del asunto es que estoy escribiendo esta reseña mientras "paseé" cómodamente en mi oficina usando esta máquina infernal.

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